(Orihuela, agosto 1933)

Amiga Carmen, amigo Antonio:

Gracias de nuevo desde aquí. Desde el aquí de soledad enlutada dulcemente de higos de mi huerto. Esos poemas –no os envío más por temor de indigestión-, para el ahí de soledad de amor de los dos, ¿en inminencia un tercero? A compás con ésta, mando a Raimundo otra con una prosa sobre el campo y el mar vuestro y mío. Ved el periódico La verdad del jueves próximo y mandar reproducción en República.
A Sijé le ha escrito Bergamín beatamente, pidiéndole en Dios que le mandara trabajos para Cruz y Raya, y Caballero diciéndole que ha estado a punto de entrar como el león en rejas –o en Dios. ¡Qué afán el de Giménez por que sepan los menores caídas de su «Camino del Calvario» fascista, que si es camino o es calvario!
Dad recuerdos a María en la que pienso mucho y en su pueblo. Dime, Antonio -¿ves como ya no te digo de usted?-, ¿cuándo haréis la excursión para, si puedo, ir?
Me dejé olvidado en el tren el cartelón taurino. Una consecuencia más de lamentar de mi torpeza.
Os saluda y piensa,

Miguel.

Dirección: Arriba, 73.
Orihuela, agosto, no, estío decidido 1933.

Publicado en Miguel Hernández, Epistolario, Madrid, Alianza, 1986.