(Madrid, 6 marzo 1932)

… Fui a Pescador, le dije aquello, y aun él… muy conocedor de todo lo barato en Madrid… (lo más temía que te fugases) malamente, barata-… yo donde iría a dormir. Nombró el amigo cierta posada… (la del Peine), pero por si tenía «ratas» no quise ir. Fue… el del domingo para mí, a las ¡diez de la noche aún no tenía… desde la noche del viernes! En fin que me dirigí de nuevo… de Morante a fuerza de mil peripecias tristes, y que en ella estoy. Ya tengo… la poesía del certamen. Enviadme en seguida el periódico que me dejé. El… esta semana iré con Pescador a oír (¡envídiame!) a García Lorca. Si vieses a César Augusto de militar te asustabas. Dice que… va a escribir un día de éstos, que no la ha hecho antes por falta de… tintero. Enviadme cuanto antes metal redondo que… venía para acá. Esta tarde visitaré a doña Concepción… Martínez Arenas si puedo y ha venido. Más adelante te diré… ado de ambas entrevistas. Dile a Fenoll que cante y cante y cante… «la teneseora» que te ame mucho. Escribid pronto. A donde… a Ballesteros que nada, la dices.

Miguel

Madrid, 6-3-32

Publicado en Miguel Hernández, Epistolario, Madrid, Alianza, 1986.