Preocupadísimos andamos por la ausencia de Raquel, cansados de un viaje a saltos (ya paramos en 5 puertos) apesadumbrados por esa despedida dramática, reciban el primer saludo desde este bonito aeropuerto de Panamá. Aún se oye hablar español aun con acentos extrañisimos. Hasta luego desde Miami (dentro de 2 horas).
R.M.E