Julio 20 – 1959
Elba: 
En casa hemos vuelto a pasar una semana terrible. Mi padre sufrió un nuevo infarto. El jueves 16 me llamó una vecina a la Caja para decirme que mi padre estaba muy descompuesto y que regresara urgentemente. Desde entonces, recién hoy parece que la lucha entre la vida y la muerte es menos enconada. Lo cierto es que el corazón de mi pobre padre va mimándose poco a poco y que su supervivencia – milagrosa, según los médicos – se vuelve cada vez más problemática.
Merced a una estricta medicación parece que volvemos a salir del trance. Su pulso aún no es muy firme, pero es mejor que el de días anteriores. Pero es difícil pronosticar una mejoría efectiva porque las alternativas se suceden vertiginosamente. Es notable comprobar las oscilaciones que padece un corazón enfermo.
El mérito de que aún lo tengamos vivo lo tienen tres doctores – uno de ellos mi primo – que permanentemente lo están controlando. Dicho sea de paso, yo aprendí bastante y según bromean ellos, yo soy especialista en Alfredo Firpo (mi padre).
Desde el jueves no he vuelto a la oficina. La verdad es que temo alejarme de casa, ya que de la presteza con que se actúe depende su recuperación. (Ayer a la mañana tuvo una bajante que salvé gracias a dos corominas y ¼ de atropina.)
En estos momentos mi madre le está dando un flan, que es el primer alimento sólido de ingiere. Tiene ánimos para charlar, aunque es prudente que lo haga sin producir agitación.
Sé que los médicos se sorprenden de que mi padre vuelva a capear esta crísis; sobretodo teniendo en cuenta su paraplejia y la secuela de transtornos orgánicos que ella acarrea. (De la cintura para abajo sus órganos funcionan por inercia, sin estímulos nerviosos.)
Espero poder proporcionarte en la próxima noticias más alentadores respecto de su mejoría.
He leído a unos amigos lo que cuentas sobre tus experiencias de educadora. Realmente me enorgullece que pienses así. Todo lo que dice allí merece marco y vidrio. Y mi orgullo se robusteció ante los comentarios que su lectura despertó entre los oyentes, que, para tu tranquilidad, eran gente culta, capaz de entender lo que estaba escuchando.
Momentos como éste me hacen sentir plenamente la satisfacción de merecer tu amistad. ¡qué bien ves las cosas!¡Qué valiente raíz de vanguardia hay en tus pensamientos!¡Que lamentable es que nos veamos tan solo para ver cinerama y comer tarta pascualina!
Me declaro incompetente para seguir explayándome en un tema que tú conoces en toda su profundidad y sobre el que no puedo aportar ninguna idea que puedas juzgar nueva y acertada.
De Lin-Yutang he leído solo “La importancia de vivir”. Es un chino norteamericanófilo, lo que le quita seriedad a su ágil y moderna filosofía.
Los norteamericanos tienen grandes escritores; no veo porqué un escritor extranjero deba hacerse el norteamericano. Lin- Yutang escribe sobre China, es cierto, pero dime si no lo hace al gusto de los yanquis.
En Estados Unidos han inventado la palabra “best-seller” (algo así como “el más vendedor”) para referirla a los libros de éxito. Es notable lo que se preocupa cierta generación (o degeneración) de escritores por merecer el “best-seller” anual. Y lin-yutang está entre ellos.
He leído en “Clarín” que, actualmente, el libro de mayor difusión en Estados Unidos y Argentina es “Lolita” de un escritor ruso radicado en E.U., cuyo nombre no recuerdo. Es tan pornográfico, según dicen, que ha batido todos los records de venta, superando incluso a “Por siempre Ambar.”
El libro se trata de un fulano que desea a una chica que tiene 12 años. Son más de 600 páginas de querer acostarse con ella.
Y hablando de libros, voy a empezar “Camino de libertad”, de Fast, que tú me regalaste.
Estoy un poco atrasado en cuestión lectura porque el escaso tiempo disponible lo ocupo escribiendo. Lo último que leí fué “El buen soldado Schweik”, que sin lugar a dudas merece el calificativo de genial. Nunca me he reído tanto leyendo algo. El autor es Varoslav Hasek, y ese fué su único libro.
Negrita se ha casado. Y bien… ya está en condiciones de contarnos qué tal es eso. Es lamentable que lo haya hecho con un tipo que merezca, según tu concepto, tu poca confianza. Pero si ella está enamorada y la que se casa es ella… no hay más que hablar. Por otra parte, quizá el hombre deponga su fanfarronería, puesto que no es un vicio incurable.
En cuanto a Carlos, está en vísperas de emular al fanfarrón. Creo que se casará para agosto, si es que no vuelve a aplazar la fecha. (Creo que la madre de la novia habrá concluído ya su ciclo de principios básicos.)
Si; no me he olvidado que prometí enviarte una grabación, tanto como para que valores mi talento recitativo. Pero como ello insume unos pesos, estaba esperando que la Caja Nacional de Ahorro Postal se digne pagarme lo que me debe.
Me gustaría que me cuentes qué cosa te ha hecho enojar realmente leyendo mis cartas. Yo trato de hacer memoria pero no recuerdo nada serio que pueda provocar un enojo más o menos importante. Demás está decir que no estaba en mí procurarlo. Siempre he dicho que soy bastante más bromista de lo que tú te imaginas. Y tú te empeñas en querer demostrarme que soy un tipo serio.
Saluda a tus familiares, y a tu padre mi deseo de pronto restablecimiento.
Cordialmente
Norberto