Mi querida hermana:
Con todo que esta carta te llegara bien
tarde lo mismo llega llenas de augurios para tu cumpleaños. ¡Como pasan
los años! Quien se imaginaba vos a los 41 y yo a los 34 cuando me
llamabas “Negra Candumbera”… Recien volviamos de Miami cuando llamaste
nos fe de mucho agrado esa sorpresa.
Tener la Tia Rosina aca es verdaderamente un sueño quien diria que
sucederia una visita de ellos a Memphis, cuantas raras y maravillosas
vueltas da la vida.
Me parece haber estado con ella siempre me la siento tan mia e
intima asi como te la sentiras voz y todas nuestras hermanas, gracias a
mama y madrina que la hicieron siempre parte de nuestra vida. Que
pena, que dolor tan grande pensar que nosotras hermanas no pudimos
seguir su ejemplo de unidad y lealtad sobreponiendo hasta la lejania y
el tiempo como siempre lo fueron ellas. Junto a Mario te mandamos un
fuerte abrazo y felicitaciones. Con amor
Rita

