Queridos Papis, abuelos, bisabuelos, tíos, tías, hermanos y primos
Como los envidio a todos! y yo se que las casas (y mesas) se
hacen más chicas, que la comida más escasa, que el bullicio más
aturdidor, más cómo se ensancha el corazón al expander la capacidad
afectiva hacia una criatura más… deseándoles toda la dicha y armonia
que para mi inmediata “familia” aquí quisiera, vuestra tia abuela
Rosita

