Bs As, 28 de abril de 1982

Querido amigo:


¡Hola! Mi nombre es Sabrina y desde hoy tu amiga.
Quisiera que a partir de hoy te sientas como un amigo de muchísimos años.
Espero que al recibir esta carta llene de alegría tu corazón.
He tenido que esperar bastante tiempo para poder escribir, no es por no querer hacerlo, al contrario quería y mucho pero me costaba.
En esta situación tan difícil que está viviendo nuestro país quería decirte que realmente me siento muy orgullosa de vos y de todos tus compañeros, que se encuentran allí para defender nuestra patria. Pero también quería decirte que nunca pierdas la fé en Dios, él es tu mejor amigo y es el que te va a ayudar y mucho. Yo desde aquí, estoy pidiendo mucho por la paz y por todos ustedes.
Quisiera que me contaras las cosas que hacés allí, que me hablaras de vós y que sentís en estos momentos. Te mando sobre y papel para que puedas contestarme. Ojalá puedas tener tiempo de contestarme.
Bueno, amigo soldado me despido, y desde ya te digo que si necesitás algo me lo digas, mientras esté al alcance mío te lo voy a conceder. Chaú, y hasta la próxima.
P.D.: suerte. Tu amiga Sabrina. Desde Bs. As. Directo a las Islas Malvinas.


Sabrina Conti 82