Todo está mejor que el día que hablamos,
no es el equilibrio, pero está bien.

Fuera oigo en la calle ruido de pájaros,
todas las mañanas, te oigo volver. 

El cielo duele tanto
que ahora moja nuestra ropa.
Y en el suelo formó charcos,
los pisé y te vi.

La lluvia no funciona,
el agua me hace daño.
Empapado solo pienso: 
¿Qué hago yo sin ti?

Todo está mejor que el día que hablamos,
no es el equilibrio, pero está bien.

El cielo duele tanto
que ahora moja nuestra ropa.
Y en el suelo formó charcos,
los pisé y te vi.

La lluvia no funciona,
el agua me hace daño.
Empapado solo pienso: 
¿Qué hago yo sin ti?

Es lluvia, son llantos.
Es suma de tantos errores, fracasos.
Soy uno de tantos.

Es lluvia, son llantos.
Es suma de tantos errores, fracasos.
Soy uno de tantos.


Julio De La Rosa

Publicado en Las leyes del equilibrio, 2005


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