Buenos Aires, El ateneo, 2001
Como se sabe, Sarmiento, entre otras tantas
cosas que hizo con fervor, escribió cartas. Muchas cartas, porque como
todo lo que hizo, lo hizo mucho. El libro de cartas que compiló Gustavo
Bombini da cuenta de eso. La selección está agrupada en cuatro grandes
temas y un colofón: el primero es el culto a sí mismo; el segundo, sus
relaciones amorosas; el tercero, las cartas para o sobre Dominguito; y
el último, su ideario político. El final es un corto texto
autobiográfico.
Los epistolarios pueden tener un sentido meramente documental y otras –
éste es el caso- un ánimo de representación sobre la mano que empuñó
la pluma que empujó a escribir esas cartas. Lo importante para que eso
es que se logre una buena selección, que ese botón sea muestra, y este
libro lo logra.
Si a U. le parece oportuno pues, con motivos de la reforma ortográfica hable de mí -necesito no dejar pasar esta ocasión de hacer abrir los ojos al público, y establecer mi nombre; esto asegurará el establecimiento de educación que tengo y mi porvenir. No le pido elogios que manejados sin medida me perjudicarían: afecte imparcialidad, vitupéreme lo que en mis escritos le parezca -deme U. consejos de prudencia, haga lo que quiera.