"La resistencia" de Ernesto Sábato
Tercera carta: entre el bien y el mal
Esta mañana di por seguro que venía la sudestada, yme equivoqué. La tormenta se mantuvo en suspenso, estática. Los grises se fueron atenuando y a latardecita ya ningún rasgo plomizo se distinguía en el cielo. Este simple e inofensivo error me llevó, imperceptiblemente, a las grandes equivocaciones que uno comete en Leer más…