Querida e inolvidable Raquel:
Con un poco de atraso me acordé de tu próximo cumpleaños, pero aunque estas líneas lleguen días después traen el mensaje de un augurio de que tus mayores anhelos se vean cumplidos, que la vida compese todos tus sacrificios y privaciones, en ti, tu esposo e hijos, esto de lo deseo desde lo profundo de mi corazón, no solamente como hermana sino como la amiga más sincera y leal, que te conoció y aprendió a quererte sin barreras ni subterfugios.
Recurre siempre a Dios en cada momento triste o de alegria, que al final de cada cosa El es el único que nos da consuelo y fuerza.
Te acordás el año pasado, que hermoso que lo festejamos con la alegria de estar todas juntas, roguemos a Dios que ese milagro pueda repetirse en un futuro que no sea tan lejano.
Cuántas cosas que tuviera de decirte, que parecen ridículo grabar en la tarjeta, comunicarnos de alma a alma como lo hicimos cuando viniste acá.
Nos estamos preparando para las (?) vacaciones creo que te expliqué donde, eso es dentro de una semana, todo lo otro sigue su curso normal, somos una familia feliz y orgullosa de existir, y pedimos al Señor nos siga protegiendo, mi pollito en la entrañas se empieza hacer sentir y me manda el corazón de desbordante amor.
Sin más deseandote lo transcurras con el mejor espíritu. Franca y familia
P.D.
Gracias por tu carta, muy tuya, me emocionó mucho
