Marzo 28 de 1933
Queridísima Bochita:
Hoy no esperaba carta tuya y por eso, acepté una invitación a almorzar en lo de Lombardi. Por supuesto que en cuanto me enteré que habían llegado noticias de mi Bochita, ni bien terminé de comer, me vine corriendo.
Sos una malita Colita al decir que he cambiado. La carta que tendrías en tu poder te da un lindo palito y me alegra.
¿Que es eso de negarle a su maridito los besitos que bien ganados los tiene? Eso de decirle que a su regreso lo dejará con las ganitas de besar su boquita querida y jugosita es una maldad Bochita preciosa. ¿Verdad que cuando estemos de nuevo juntitos no vas a negarme tus besitos?
Si yo te adoro con toda mi alma y me gustas con locura ¿Porqué vas a ser malvada conmiguito?
Como Siempre, vivo entusiasmado con mi preciosa noviecita y estoy saltando de alegría porque solo faltan 2 días para vernos. Sin embargo, esta última semana de separación me ha parecido interminable.
Mi Bochita querida, mi muñequita divina, mi mimosa deliciosa, yo la adoro y si yo le digo que también la deseo ¿qué me diría la picarona divina? El tesorito esta hecho una furia de ganitas de estar con usted. ¡Sos una mujercita algo realmente deliciosa! ¡Te tengo unas ganitas bárbaras de abrazarte fuerte y llenarte de besitos y hacerte mil caricias. Tengo unos deseos bárbaros de casarme con mi Bochita, muñecón precioso y encantada de su marido que la adora ferozmente.
¡Estoy desesperado por estar con vos! Su Cococho esta enamoradísimo y no vé el día de estar juntitos para contarle todo lo que la quiere y besarla mucho, mucho, mucho.
Sos una cosita tan linda, tan sugestivamente interesante, me atraes de una manera tan irresistible que estoy completamente seguro de que me vas a hacer el hombre más feliz de la tierra.
Cuando pienso estas cosas me posesiono tanto que hasta (¿?) las mil delicias que eres capaz de ofrecerme.
Sos una mujercita tan preciosísima, que harás la dicha de tu Cococho querido.
Te juro, vida, que te adoro con toda mi alma y sin tu cariño no puedo vivir. Yo te adoro, mi Chiquitita, mi corazón divino y por nada del mundo te abandonaría jamás. Te quiero con locura, te adoro, te idolatro, mi noviecita santa.
Hoy recibí carta de una prima de La Plata, la hija de Tío Bernardo, donde me felicitan y te felicitan a vos también por como bien dice, has influenciado con tu estímulo y tu aliciente para que yo me esforzara en terminar cuanto antes y por lo tanto, mi éxito es también el tuyo.
Si yo no te adorara como te adoro, no estaría hoy recibido. Vos has sido para mi y continuarás siéndolo mientras viva, mi razón de triunfo, mi estímulo constante y con tus consejos y con tu presencia adorable soles darme ánimo y valor cuando las circunstancias así lo exigieran y serás la principal beneficencia de todos mis triunfos y de todos los halagos que en la vida en común, puede ofrecernos.
Sos un encanto vida mía, algo realmente estupendo que yo adoro por sobre todas las cosas de esta tierra porque me has dado la verdadera felicidad.
¡Tengo unas ganitas de mimarte mi tesoro querido! De hacerte muchos mimitos y de contarte muchas cositas lindas que te hablen de toda mi adoración y entusiasmo.
¡Verás que encantada vas a estar conmigo este año! ¡Verás cuantas cositas bonitas van a suceder! Desde casarnos hasta estar precisamente instalados en un departamento bonito donde esté de acuerdo y armonía con la flamante y encantadora mujercita. Estarás muy contenta y dichosa con tu maridito que te adora y recién entonces, apreciarás en forma lo mismo que yo, el inmenso cariño que nos tenemos.
Estoy completamente seguro de la felicidad de nuestro próximo hogar porque te conozco y sé lo que vales y todo lo que representas para mi.
Mi adoración por mi Cococha lincha es inmensamente sublime ¡Sos una virgen para mí!
Te quiero con locura, con toda pasión, te adoro.
Ahi van muchos besitos que como muy pícaros los he pensado, se repartirán sabiamente. 00000000000000
Un abrazo grandote y un beso lindo.
Tito
