1943
De Carlos, Irma y Carlitos a Sr. Alejandro Sala y Sra. – Mar del Plata, 4 de enero de 1943
Sr.Alejandro Sala y Sra.Desde esta hermosa playa, les enviamos un cariñoso saludo.Carlos, Irma y Carlitos Enero 4/ 1943
Sr.Alejandro Sala y Sra.Desde esta hermosa playa, les enviamos un cariñoso saludo.Carlos, Irma y Carlitos Enero 4/ 1943
Estamos en el 2do. día de veraneo que se presenta encantador, muy contentas esperando tus noticias.-
Mamá todavía espera el telegrama prometido que no llegó pero se figura Perusito siempre encantador y bueno.-
Nuevamente saludos, -vamos a la playa-
Mamá y Ana
P.D.: la redacción es de mamá A.
Hoy fuí al mar ¡que belleza!! estaba eufórica, es la primera vez me meto en el mar y espero que no sea la ultima.
Mar del Plata 2/1/38
Querido abuelito y tios
Estamos bien y a pesar de que nos divertimos y paseamos bastante debemos lamentar que el tiempo no nos favorezca mucho pues hace fresco y hay mucho viento
Reciban saludos desde estas hermosas playas.
Embejes y flia.
Hotel Castelar
27/2/35
Mar del Plata
Primero muchos saludos y luego les dire; que hemos hecho un viaje muy hermoso sin pinchaduras Salimos de Avellaneda a las 5 y llegamos a Mar del Plata a las 4, hasta pronto
Pedro, María y Coca
21/2/33
Es muy lindo Mar del Plata, la rambla y sus alrededores, la Explanada hasta Cabo Ctes. que ya hemos visto, pero hay que caminar mucho para ir a todas partes, estamos bien y Nestor muy contento. tiene mucho miedo al agua.
Desde este remansado rincón patagónico, les hacemos llegar un afectuoso recuerdo, extensivo a toda la familia.
Yo pienso regresar a Bs. Aires en el avión del día 20.- Amalia seguirá gozando la fresca viruta. Hasta prontito.
Pocho y Amalia
21 de Febrero de 1946
Con cariño de
Luis Rosa Pepe y la nena
Para Tio Toto y Tia Carmen
Gracias por averiguarme como va River en el campeonato, ya que acá llegan las noticias pero medio tarde.
Nestor cuando lleguemos vamos a comernos unos asaditos, vinito incluido, ya que los hace barbaros. Eso de que estoy mas alto es mentira pero mas gordito un poco. Es que la vida de cocinero es muy sacrificada.