28 de agosto de 2015
Elba: estos días han sido muy ricos en experiencias político-sociales. Tucumán ha disparado una fuerte correntada de debates en los más difíciles niveles. Yo participé en algunos, con algunos allegados al Pro y con periodistas. Las conclusiones más interesantes que hemos obtenido es que el Gobierno y Scioli abren el paraguas, se aguanta el chubasco y luego, apenas se disipan las nubes, tan campantes, reemprenden su camino. La táctica que utilizan es sencilla: se hacen los sordos y los distraídos, miran hacia otro lado, se escabullen en Olivos y cuando renace la calma asoman de nuevo la nariz y reanudan la serie de cadenas nacionales. Con todo, Tucumán ha servido para que los principales líderes del arco opositor no le temieran a la foto y se mostraran junto. Es todo un acontecimiento, y quizá el punto de partida de nuevos encuentros. En mi opinión, la ciudadanía sensata (que la hay, aunque no mucha) ve con ojos de esperanza esta posibilidad,
Lindísima la historia de Claudia Souza, enfermita cuando estaba en quinto grado y que ahora tiene 3 años, vive en España y es poeta. El título de su libro me pareció muy original.
Definitivamente tenemos puntos de vista incompatibles respecto de los Testigos de Jehová. Estimada vieja amiga, hay creencias retrógradas que, aunque sinceras y legítimas, estupidizan… y yo no estoy en sintonía con la estupidez.
Vía engendro, considerate recibiendo un fuerte abrazo. N.
